Ayer se desplomó el Mercado Central de Abastos de Linares. La lluvia, los fuertes vientos y su deterioro han acabado con un icono que fue construido entre 1903 y 1906 por el arquitecto Francisco de Paula Casado y Gómez cuando la ciudad de Linares vivía una época de prosperidad y crecimiento social.
«Esta obra es señera del estilo historicista neomudéjar, proyectado como colofón a un largo y complicado proceso que se inició en el año 1875. Aquí se introduce la novedad del uso casi generalizado del ladrillo en la conformación del muro y de un mayor aporte técnico y constructivo, cercano ya a la estética neomudéjar», señala el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico.
Tomás Vico, representante de los comerciantes del mercado y trabajador del mismo, ha trasmitido su desconsuelo y el de sus compañeros, unos 17 trabajadores, ya que se quedan sin trabajo y sin medio de vida: “Ahora es cuando tenemos que estar todos unidos y buscar una solución urgente”.
¡Esperemos que se encuentre una solución para todas las familias afectadas!